Gracias a mi amigo Camilo, argentino y, de adopción, gallego y vegano, me introduje al tema de hacer hummus (o patés, porque no llevan garbanzos) que fueran ligeros, ricos y, de paso, que no tengan más que frutos directos de la tierra.
Él me enseñó una receta súper sencilla: paquete de anacardos y bote de olivas negras, con el estándar de paquete del Mercadona. Vamos allá:
La receta no tiene mucha historia, de ingredientes necesitas
- Paquete de anacardos de 150 gr
- Bote de olivas negras, sin hueso, de 150 gr (350 gr peso sin escurrir)
- Un chorrito largo de aceite de oliva Virgen Extra (recomiendo El Carrasqueño)
- (Opcional) Un poquito de jengibre o pimienta negra

Para realizarlo solamente necesitas una batidora, una cuchara (mejor, una lengua de gato) y un cuenco. Los pasos:
- Introduce los anacardos y las olivas negras a poquitos en el bote de la batidora, alternándolos para que sea más fácil procesarlos. Incluye el agua de las olivas, eso le da mucho sabor
- Échale el chorrito de aceite y luego el jengibre o la pimienta si gustas
- Bátelo a máxima potencia, de arriba a abajo y de abajo a arriba, hasta que quede una pasta homogénea y fluida.
Listo!
¡Perfecto! ¿Y qué más opciones tengo? Pues yo he hecho experimentos con más cosas:
Pimientos de piquillo y anacardos: riquísimo, tiene un toque más dulce pero es uno de mis favoritos. Estupendo para tomar con pan pero, sobre todo, con pastas o arroces.
Remolacha y anacardos: es muy suave, ideal para acompañar a pastas.
Caballa y anacardos: vale, esta es la excepción con un pescadito de conserva. Hay que hacerlo rebajándolo con agua, también para que se pueda hacer bien en la batidora. Está muy bueno pero es fuerte, es para comer con bastante pan o picos.
Espinacas y anacardos: muy buena combinación, muy verde. La lata extra es cocinar las espinacas pero, si guardas parte del agua para la batidora, conseguiras un sabor extra.
Espárragos y anacardos: muy rico y muy suave, es una buena combinación.
Estos fueron los experimentos que salieron razonablemente bien, pero también los hay que no salieron bien.
Olivas rellenas de limón y anacardos: es bastante fuerte aunque hay a quien le gusta. La pregunta es: ¿por qué olivas rellenas de limón, Mercadona?
Castañas y anacardos: da mucha lata por cocer las castañas y, encima, no tiene mucho sabor. No lo recomiendo.
Berenjenas y anacardos: mala idea, especialmente si cocéis las berenjenas sin haberlas dejado a remojar (para quitarles parte de la acidez)
Olivas negras y avellanas: muy fuerte, sabe mucho a avellana.
Mejillones y avellanas: el peor, realmente era como una nocilla de mar…
Iré actualizando esta entrada con más pruebas que haga, no he dejado de probar y seguiré probando, porque estos patés te resuelven una cena o un picoteo de una manera ligera y – bastante – saludable.