Así fue 2019: Diariomotor, Tectónica y aire renovado

Este año ha sido un año de avanzar en cambios que arranqué en 2018. Este año ha sido el de cumplir conmigo mismo una serie de deseos vitales y de avanzar hacia un camino en el que me sintiera más feliz. Sobre todo, en la parte laboral porque en la personal puedo decir que soy muy feliz 🙂

Una de las cosas que he cumplido en este 2019 ha sido vivir en Barcelona, una experiencia enriquecedora que, sin duda, ha sido una de las mejoras cosas del año. Sólo fueron tres meses pero en esos tres meses pude cambiar de aires, conocer a muchas personas y tomar un poco de respiro a nivel laboral (no dejé de hacer cosas, pero me lo tomé más con calma). Así que eso sirvió para avanzar más adelante.

En 2019 viví en Barcelona, me embarqué en Tectónica, volví a Diariomotor y empecé a echar una mano en Startup Galicia.

En junio volví de Barcelona para centrarme en Santiago, pero sin un rumbo fijo por el que tirar. Quería aprovechar el primer mes de verano para reflexionar y decidir qué camino tomar. Confieso que me cuesta mucho – y siempre me ha costado – ver qué camino elegir pero me resulta más sencillo reconocer los caminos por los que no quiero seguir.

Tenía claro que no quería retomar viejas malas prácticas – no malas en sí, sino dañinas para mí – de obsesionarme con el trabajo y andar con mil frentes abiertos. Sin duda eso lo tenía muy claro pero no así qué labor desempeñar, a qué enfocarme. El paso por la clínica veterinaria me había aportado un montón pero no veía claro ese camino, el de la veterinaria…al menos, como auxiliar veterinario.

Tampoco veía claro seguir en la parte más de desarrollo de software. Esa etapa para mí está ya pasada, aunque por entretenimiento y por puro cacharreo me apetezca tocar alguna web. Además, está por ahí el grupo de WordPress Compostela en el que me gustaría aportar (más de lo que he aportado, propósitos de 2020). En cualquier caso, la tarea de programación como trabajo es algo que he descartado.

Mi historia profesional contada como si fuera un desarrollo de software

Con esto llegamos a dos momentos clave. El primero fue agosto, en el que a través de mi socio Daniel me senté con los creadores de Tectónica, un site de contenidos digitales sobre arquitectura. Necesitaban una ayuda a nivel digital para avanzar en su proyecto y un mes más tarde ya estaba trabajando mano a mano. Como una especie de Product Manager, tomando el control de la parte digital, ayudando a evolucionar la parte editorial, el SEO, aconsejando en el modelo de negocio, etc.

El siguiente momento clave fue una charla con Daniel para analizar qué tal estaba evolucionando Diariomotor este año. Lo cierto es que todo iba fenomenal: ya éramos el medio digital del motor con más audiencia en España (Comscore) y el negocio estaba fluyendo. Pero faltaba una parte de lo que yo aportaba tradicionalmente en España: la interconexión de toda las piezas que dan lugar al producto vendible a anunciantes. Un punto de conexión entre comercial, tecnológico, editorial, etc.

Y ese era justo el hueco que yo buscaba, como Product Manager. Ahora aporto a dos proyectos distintos, uno que fundé hace ya casi 15 años y otro en el que he aterrizado no hace mucho. Pero quería hacer algo más, quería aportar un granito de arena más a la comunidad. En febrero de este año eché una mano para crear Compostela Tech, una meta-comunidad que agrupa a los pequeños grupos que comparten tecnología en Santiago de Compostela. Además de crear una imagen unificada hicimos un evento con formato Open Space que salió muy bien.

Pero quería hacer algo más y me uní al fabuloso equipo de Startup Galicia para impulsar un proyecto que ya se llevaba cociendo un tiempo: el mapa de startups gallegas. La idea tras el mismo es muy sencilla: visibilizar las empresas con sede en Galicia que ofrezcan un servicio diferencial con un modelo de negocio novedoso o que usen tecnologías innovadoras.

Me siento muy orgulloso de haber ayudado a que saliera eso y de tantas otras cosas que he hecho este año. Pero no quiero quedarme parado, sé que tengo mucho que aprender, mucho que solucionar y mucho que crecer, como profesional y como persona.

2020 se presenta con muchos desafíos, con el objetivo de hacer crecer la audiencia y el negocio de Tectónica por un lado y de aportar a Diariomotor para hacerlo más grande y, por qué no decirlo, más rentable.

Ya te voy saludando, 2020 🙂

Bola de pelo extra: Las 7 claves que me ayudaron a ser más feliz, más sano y más equilibrado
Photo by Natasha Miller on Unsplash